La celda número 33
Llevaba ya casi 3 años de presidio, y como
muchos simplemente había caído en el gusto y placer del dinero fácil a través
de los robos de automóviles, la cárcel no era la gran cosa, solo debías
reunirte con los tipos indicados y nada malo te pasaría, e menos que buscaras
problemas o te convirtieses en la obsesión de algún degenerado con poder en
aquel pequeño y bizarro universo alejado del mundo real
Tenía que cumplir 10 años, para muchos podría
parecer una eternidad, pero al no tener familia afuera simplemente me importaba
una mierda el mundo exterior, francamente nunca me sentí parte de esa sociedad
sumamente repulsiva y a la vez sínica, todos muy bien ordenados aparentando
seguir las reglas cuando en su interior no son más que bestias con los
instintos retraídos.
La vida tediosa cambio un dia, se sentía en el aire,
hasta los matones del ala oeste habían dejado su recolecta de cigarrillos ese dia,
algo iba a ocurrir, se sentía en el aire.
Los guardias especulaban a escondidas, susurraban, mis colegas presidiarios
no se percataban de tal situación, pero mi cualidad de mirón pudo prever que “algo”
iba a ocurrir ese dia.
A eso de las 3 de la tarde vemos como un gran número
de guardias comienza a sacarnos y a formarnos, como cuando hacen redadas de armas,
drogas o ese licor de verduras que el gordo de la celda 20 solía vender por 20 cigarrillos,
pero esa redada era extraña, era en pleno dia y no sacaron nada, solo nos querían
afuera. de pronto vimos como sacaban de
una oficina a un tipo encadenado por completo , manos , pies y esas largas
cadenas que unían de cuello a tobillos ,
el tipo no era nada distinto a lo que habíamos visto y nada amenazante
físicamente , era delgado , tés blanca , cabello lizo negro , pero de lo que si
nos percatamos era de su mirada penetrante y vacía, era algo extraño , como si
su presencia cargara el aire de alguna forma.
Paso a paso continuo en su marcha torpe, y me
di cuenta de algo que al parecer nadie se percato, su mirada, no tenía miedo, y
su sonrisa era casi como un perro que ve a su amo traerle la comida, ansiosa y demencial. Los guardias lo condujeron hacia la celda número
33, característica por estar siempre vacía, de vez en cuando usada solo para
castigar reos y dejarlos varios días sin luz ni comida, en si era una celda
normal, pero por algún motivo rara vez habitada, se adentraron en ella y sin dejar de
apuntarle (lo cual era raro ante semejante espantapájaros) le quitaron sus cadenas
y cerraron la celda..
La primera noche no ocurrió nada , solo
comentario sobre aquel extraño personaje y de cómo le harían la vida imposible
en cuanto pudieran ,pero algo me llamo la atención , cuando mis compañeros de
celda por fin pudieron rearmar una vieja radio regalada por uno de los guardias
ya jubilados , en las noticias nocturnas escuchamos como aun estaban
encontrando cuerpos desmembrados en situaciones extremadamente violentas y que
ya era el cuarto dia , llegando supuestamente a la víctima número 66 del
asesino atrapado la noche anterior.
También comentaban como las fuerzas policiales
tras esa captura comenzaron a exigir mejores condiciones y más recursos para
poder llegar a la cifra final de aquella matanza , finalmente comentaron su descontento
ante el poco apoyo prestado a las familias de los 5 policías muertos tras el
operativo
Esto me llamo enseguida la atención, mis
colegas de celda solo se preocupaban del partido de futbol que vendría después
de dichas noticias-
Al dia siguiente pudimos ver como salía de su
celda , escuálido , con esa mirada retorcida y su sonrisa perturbadora, personalmente no soy de fijarme en el resto
de los reos , me importa una mierda si viven o no , después de todo ya llevaba
3 años de los 10 que debía cumplir, pero
este tipo era sumamente extraño , me percate que rara vez sacaba sus manos de
los bolsillos y que simplemente se limitaba a salir y sentarse, hasta que uno
de los matones del ala oeste se dispuso a cobrarle si mensualidad , dicho tipo
, uno de los sobrinos de un conocido narco de la ciudad trataba de establecer
su supremacía en este pequeño reino de delincuentes menores y tuvo la
desgraciada idea de acercarse a este tipo , el de la celda 33.
Poderoso y flamante se paro frente a el y tras
varios insultos le cobro su dinerillo como el lo llamaba (cigarrillos) , ante
eso ocurrió lo más extraño que he visto en mi vida y a la vez lo más repugnante y
asqueroso, el tipo de la celda 33
simplemente se paro , sin quitarse las manos del bolsillo , se acerco a la
oreja del matón y le susurro unas palabras , tras esto, el rostro del matón cambio
por completo, paso de su sonrisa sínica a una mueca en forma de u invertida ,
tras esto dio media vuelta , camino torpemente hacia el tubo del desagüe y comenzó
a darse golpes brutales contra su rostro , golpe tras golpe emanaba un chorro
de sangre indescriptible , tras el cuarto golpe comenzaron a volar dientes y trozos
de carne que posiblemente correspondían
a parte del labio y la lengua , sus amigos solo optaron a sujetar sus brazos en
un intento por detenerlo ,grave error , el matón se deshizo e ellos y arremetió
con más fuerza que nunca contra el tubo , el cual termino por incrustarse de
lleno en el rostro partiendo nariz , boca , parte de los ojos , fue tal el
golpe que no tengo la menor duda de que el tubo llego al mismo cerebro, y vimos
como moría de rodillas con el tubo incrustado y su cuerpo dando espasmos.
Los guardias casi no reaccionaron, nunca habían
visto algo semejante, ni siquiera nosotros lo habíamos visto, solo atinaron a
llamar al doctor y ordenar que el resto de los reos se alejaran del lugar, y así
lo hicimos gustosos, mientras el reo de la celda 33 seguía en su sitio, con si
mirada vacía y su sonrisa retorcida
La noche fue extraña, increíblemente silenciosa,
el matón no era del agrado de los demas reos, pero la muerte que tuvo fue realmente
bizarra y misteriosa, y rondaban en nuestra mente preguntas como ¿Por qué lo
hizo? Que le susurro al oído el reo de la celda 33? Acaso fue eso lo que lo
mato? Todo era demasiado extraño y el ambiente estaba cargado de un miedo terrible,
fuera de lo común aun para un lugar como esa cárcel.
Mi s compañeros de celda rara vez pensaban en
algo distinto al futbol , pero esa noche se encargaron de sintonizar las
noticias , después de una ardua lucha con la antena lograron sintonizar la
emisora cuando hablaban de la victima numero 82 encontrada en condiciones
extrañas, señalaban que al parecer el cuerpo había sido desmembrado lentamente
y que la víctima al igual que las demás había estado conciente hasta el último
minuto de su agonía, también recalcaban que la comunidad estaba mucho más
tranquila al saber que el asesino había sido apresado , pero que el alcaide de
la prisión solicitaba el traslado del reo o que le dieran más recursos para la
seguridad de guardias y de los mismos reos de la prisión , tras escuchar esto nos miramos con cierto
miedo, recordando las extraña muerte que habíamos presenciado durante la tarde.
Durante la noche, casi entre sueños pude
escuchar algunos gritos, no es que no se escucharan en un sitio donde las
peleas y violaciones son cosa diaria, pero estos gritos eran diferentes, eran
de dolor extremos, casi de tortura, y los guardias parecían ausentes,
finalmente me dormí pensando en estas extrañas situaciones que acaecían en
nuestro extraño y pequeño mundo alterno.
Me desperté de golpe , los guardias exaltados
comenzaron a sacarnos , lo cual me pareció extraño ya que el gordo de la celda
20 no había recibido ni frutas ni verduras suficientes este mes como para hacer
su elixir de felicidad , fuimos paso a paso saliendo cual regimiento de ladrones
y vimos algo que no habíamos imaginado ni en nuestras mas grotescas pesadillas
, al pasar frente a la celda 33 vimos como un par de guardias apuntaban a la
cabeza de este extraño sujeto, pero no era eso lo que nos abrumaba , sino la
celda y el tipo en sí , estaba cubierto de sangre y carne humana , restos de
telas , pude identificar un trozo en el suelo , era tela del uniforme de un
guardia , la celda entera estaba bañada
en sangre , restos de entrañas y pedazos de carne , y “el” ahí sentado mirándonos
con su sonrisa desquiciada, como si fuese el rey del mundo y que nada podría
tocarlo , como si estuviese justo en el lugar que había planeado.
Estuvimos prácticamente toda la mañana mientras
los guardias , forenses y hasta el cura que venía los domingos terminaran de
hacer lo que se propusieron hacer (sea lo que sea), en el patio estábamos en
silencio, cada uno tratando de deducir que diablos había pasado, hasta que uno
rompió el silencio y dijo “fue anoche , fue el grito que se escucho, estaba
destrozando al guardia nuevo”, todos nos giramos y en silencio consentimos con
la mirada, había sido ese tipo , de alguna forma el había sido, pero
¿Cómo? , la celda estaba cerrada,
el guardia estaba destrozado en mil pedazos como si hubiese explotado o
como si ese tipo lo hubiese desmenuzado de alguna forma, ¿Qué diablos había pasado? Palabras como imposible,
miedo, Satanás, endemoniado se escucharon durante toda la tarde, también escuchábamos los gritos de ira que transmitía
el alcaide a través del teléfono, señalando que no podía mantenerlo más aquí.
Esa tarde solo vimos al reo de la celda 33
cuando entramos , estaba en su celda ya limpia , pero esta vez completamente
encadenado , como cuando lo vimos llegar, de pies , manos , cuello y esta vez
le habían agregado algo especial , encadenado directo al suelo, en teoría eso
nos iba a tranquilizar , el tipo no se podía ni mover, pero no fue así , era su
mirada , su sonrisa , esa piel pálida, todo en el no hacía pensar que no
importaba cuantas cadenas le pusiéran, nadie en esa cárcel estaría a salvo.
Como ya se había hecho costumbre mis colegas de
celda trataban de sintonizar las noticias , esta noche nos topamos con algo
extraño, unos comentario casi ridículos ante los oídos de mis colegas de profesión
, pero que para mí no lo eran , hablaban una serie de comentaristas que
trataban la situación de los cuerpos que aun seguía encontrando y que llegaban
al número 122 , los 4 eruditos que trataban el tema pertenecían a 4 logias de una orden llamada “huesos y sangre”,
había escuchado de ellos por un antiguo profesor de primaria que solía
relatarnos como dichos señores buscaban reclutarlo , siempre y cuando dejase su religión ,lo cual
mi profesor negaba a diario , estos “eruditos” señalaban que la posición de los
cuerpos correspondían a ciertos rituales antiguos prohibidos tanto por la
iglesia católica como por miembros de otros grupos cristianos y no cristianos ,
también señalaban que era de importancia que dicho asesino continuara con vida
ya que al matarlo podrían desencadenar aberraciones aun más peligrosas, lo que más me perturbo fue el comentario
final , uno de ellos al parecer el más anciano
señalaba que “la bestia” debía ser alimentada cada noche y que si no lo hacían
lo haría por su cuenta y lo lamentarían.
Mis colegas solo atinaron a reír y preguntarse que habían fumado esos cuatro chiflados, pero yo sabía
que esa antigua orden no se caracterizaba por fumar cosas raras y mucho menos
por transmitir semejantes precauciones en radio nacional, lo único que se me venía
a la mente era la palabra “desesperación”.
La noche paso rápida , y despertamos con
nuestros guardias nuevamente exaltados y sacándonos al patio , en mi interior
me dije “que raro ,no escuche ningún grito”, pero al pasar frente a la celda 33
vimos como el gordo de la 20 se encontraba encadenado desde el cuello al techo de la celda , el resto de las cadenas estrangulaban
brutalmente su cuerpo dejando escurrir sangre y otros fluidos que quisiera no
haber visto , y ahí , en su trono , ese maldito demente nuevamente con armas en
su cabeza y con ninguna cadena en su cuerpo , sonriendo , regocijándose ante el
cuerpo de nuestro antiguo proveedor de alcohol, era realmente aterrador , ni
los guardias ni nosotros sabíamos qué diablos pasaba , lo único que sabíamos es
que ese demente no solo estaba matando a personas sino que los estaba
destrozando, y volvían a surgir preguntas , ¿Cómo se quito las cadenas? ¿Como
metió al gordo a la celda? ¿Como nadie se dio cuenta? Qué diablos pasaba con
los guardias durante la noche
Pasamos toda la tarde en un silencio sepulcral,
lo cual era raro en ese lugar, hasta que del grupo un tipo al que llamaban “choco”
debido a su piel oscura ganador del
premio mayor en años de cárcel por matar ancianos en el asilo donde trabajaba dijo “matare esta noche a ese bastardo, conseguiré
las llaves lo partiré a la mitad” lejos de alegrarnos su comentario nos trajo
la intriga de que pasaría esa noche, el mundo se estaba volviendo más irreal
que de costumbre.
Esa noche no hubo radio, los ánimos estaban
bajos y los guardias tensos se encargaron de darnos las buenas noches a gritos,
el sueño fue difícil de alcanzar, por miedo y por expectativa de que iba a
pasar, ¿quien ganaría? Choco con 1.90 metros de altura, asesino de ancianos o
el reo 33 con sus escasos 1.50, de cuerpo escuálido y causante de muertes
grotescas y poseedor al parecer de habilidades fuera de lo común?
Por tercera vez despertamos con los gritos de
los guardias , casi se nos hacia costumbre ,salimos formados con la esperanza
de que choco hubiese cumplido con su cometido , pero supongo que en nuestro
interior sabíamos lo que había ocurrido , el señor choco , asesino de ancianos
, estaba atravesado entre los barrotes de la celda 33 , su dorso , brazos , hombros , parte de la
cabeza estaban completamente atravesados , de una forma en que hasta el más
aventurado de los físicos no se atrevería a descifrar , de el salía un lento
pero constante chorro de sangre, los guardias aterrados apenas podían mantener
la cordura , mientras el reo de la celda 33 estaba ahí , sentado en su trono
sonriéndonos mientras sus pies chapoteaban en sangre.
La mañana y la tarde la pasamos en el patio,
silenciosos y aterrados pocos se animaron a comer y los gritos del alcaide
reflejaban una mezcla de ira, miedo e impotencia, lo último que grito fue “está
bien, lo hare malditos bastardos, lo hare”, todos supusimos que su pelea con
las autoridades terminaba en una nueva derrota y que mañana nuevamente estaríamos
viendo otra escena del crimen mezclada con la dimensión desconocida
Al terminar la noche los guardias actuaron de
forma extraña, nos separaron a algunos , un grupo de 5 y nos llevaron al viejo
salón donde guardaban las herramientas de carpintería, todo era muy extraño, el alcaide se paseaba por afuera tomando su
cabeza con una mirada de impotencia y
desesperación , de pronto me percate de algo lúgubre , de los 5 que estábamos
ahí , ninguno tenía familia ni amigos , nadie nos esperaba afuera , nadie en el
mundo exterior notaria nuestra ausencia , de pronto vi la imagen más aterradora
que pude presenciar , encadenado y con armas apuntando a su cabeza traían al
reo de la celda 33 ,el alcaide al verlo entrar se acerca a nosotros mientras
los guardias cierran con llave las principales puertas dejando solo una salida.
Nos mira a los 5 mientras los guardias comienza
q quitarles las cadenas al demente y con voz angustiada nos dice “lo siento, la
bestia debe ser alimentada” baja la mirada y se retira tras los guardias que no
nos dejan de apuntar, se retiran lentamente hasta cerrar la ultima puerta, mis
colegas desesperados comienzan a buscar alguna salida pero es inútil, por
primera siento que desperdicie mi vida y nos encontramos en el silencio de la noche,
frente al reo de la celda número 33.